an emotional meeting

"Y por que un corazón no es suficiente para todo lo que pienso amar, y desamar, y vivir y morir  y tomar buenas y malas decisiones...en mi cuerpo deberían convivir al menos siete, perdón seis corazones sanos y fuertes, el domingo descansare y no usare ninguno, no por alguna coincidencia religiosa sino por que miro mucha tele desde la cama ese día"









Gutierrez escribió eso por la mañana mientras desayunaba, lo anoto en una tostada con dulce de leche, aun no se como lo hizo pero quedo increíblemente prolijo.

Luego decidió volcar todos esos increíbles pensamientos en bellisimas cartas que en su debido momento enviara al lejano Oriente.
 Por cada carta que envía o que piensa enviar, hay unas ocho o nueve que serán descartadas, por creerlas fáciles, mundanas, chabacanas, pornográficas (con dibujos por demás ilustrativos), desconcertantes, ofensivas, provocativas, filosóficas, aromáticas...por ahora piensa arriesgarse a que lo traten de aburrido dentro de la seguridad que le brinda el saber que aun no estropeo nada de nada.


Luego me cuenta, casi entre susurros, que una vez caminando con ella de la mano podía escuchar como los corazones de cientos de hombres (y de tres mujeres) se rompían al verlos pasar...o eso creyó
mientras pisaba un montón de hojas secas.